Televisa, la empresa mexicana de medios de comunicación más importante en el país, fue participe en la producción y ventilación de varios montajes orquestados por el mismo García Luna.

El objetivo que tenía la televisora era claro, señalar y comenzar a culpar a grupos rivales de narcotraficantes, como los culpables de la crisis de seguridad nacional que comenzaba en el sexenio de Vicente Fox y que con Calderón se agudizó al iniciar la llamada guerra contra el narco, que lo único que buscaba era proteger al mejor postor desde puestos estratégicos de alto nivel dentro del gobierno federal.

Uno de los escándalos que dejó mal parada a la televisora fue la detención de la francesa, Florence Cassez e Israel Vallarta Cisneros en diciembre de 2005, como miembros clave de una banda de secuestradores, después se supo que lo que se había televisado únicamente era parte de un montaje para dejar bien parada a la extinta Agencia Federal de Investigaciones (AFI) y a su titular, Garcia Luna.

El montaje en el que se dice participaron altos ejecutivos de Televisa, así como funcionarios de alto nivel del gobierno federal, puso en jaque la detención de la banda de secuestradores y en especial de la ciudadana francesa Cassez.

Algunas decisiones sobre que grupos delincuenciales defender, llegaron a contradecir al mismo Calderón con Garcia Luna, debido a las fuertes sumas de dinero que circulaban por sus manos, los cuales tenían el objetivo de de comprar para convencer a los jefes militares de trabajar en la misma linea, defendiendo a los mismos ganadores de la puja seguridad federal para el trafico de droga en el país.